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Después de la exitosa adaptación de Sin City, Frank Miller regresa con una gloriosa y épica historia de una de las batallas perdidas más famosas en la historia de la humanidad: La batalla de Termópolis. Dirigida por Zack Snyder, 300 narra la batalla del rey Leónidas (Gerard Butler) y 300 espartanos que deciden luchar hasta la muerte contra miles y miles de tropas invasoras persas capitaneadas por el rey Jerjes. Es una historia de carácter, coraje y valentía muy bien lograda. Los efectos visuales son impresionantes y el director utiliza recursos muy creativos de efectos especiales como lo es el combinar diferentes velocidades de cámara creando un efecto fascinante. Hay una secuencia que sobresale, donde la coreografía de pelea corporal, lanza y espada tiene una combinación tan bien lograda, que es una verdadero espectáculo observarla. El alto contraste de la imagen. combinado con efectos de iluminación y renderizado digital hace de cada cuadro una pieza única de composición visual exquisita. Definitivamente una película totalmente formalista, nada sentimentalista pero con un gran mensaje sobre la fortaleza interior. Lo único que demerita la cinta (para algunos), es la brutalidad de algunas escenas, así como lo bizarro de algunos personajes, pero este tipo de detalles es precisamente el estilo de Miller. Creo que es una gran dramatización, con un argumento medianamente plausible pero que al ser basada en hechos reales, cobra una vida y fuerza propia. Recordemos que nuestra cultura actual es el resultado de estas invasiones y batallas, que aún hoy día se llevan cabo entre diferentes culturas.